No hemos tardado mucho en inaugurar el año 2024 en el agua. Si bien fue una sesión con poco que contar, ya que las condiciones no fueron las más óptimas.
La verdad es que nos asomamos por allí (Zavial) un poco de rebote, ya que veníamos de visitar el taller de nuestro amigo Uwe (gracias por echarnos una mano con ese tornillo rebelde) y lo normal era echar un ojo por la zona.
Al ver a tanta gente allí, lo normal es que fuera por una razón de lógica, como que el resto de “spots” estuviera peor, y como el caso era entrar al agua, pues allí que fui.
Como se ve en el vídeo, a parte de olas cerronas, poco fondo y mucha gente en el agua, no hubo mucho que rascar. Y lo peor es que salí del agua con molestia en los abductores o psoas (no es la primera vez) y ello hizo que al día siguiente (domingo) descartara entrar al agua para no comprometer el entrenamiento de baloncesto del lunes.
También es verdad que el domingo bajó mucho el mar y no quise arriesgar para tan poco premio (aunque el día estaba espectacular)
Este año no tengo en mente acudir a ninguna competición de waveski, así que me lo tomaré con más calma.