Tras un otoño horroroso, en cuanto a olas (no entró nada decente en la zona de Cádiz, al menos, en fin de semana), al regreso de nuestro viaje navideño a León tuvimos un buen regalo de despedida y entrada de año.
El miércoles 29 disfrutamos de la entrada de un “swell” muy sólido, con 1,5 m y 14 segundos que duró todos los días que estuvimos en la zona de Caños de Meca (un total de cinco días, hasta el domingo 2 de Enero)
Bien es verdad que debido a que nos bajamos del Norte con un buen resfriado (Tere y yo), hubo que dosificar algo las surfadas. Aunque las condiciones del mar también se prestaron a ello (por ejemplo, el sábado se metió un fuerte levante que destrozó el mar)
De todas maneras, hubo buenísimas olas el miércoles, el viernes y el domingo (el jueves, preferí salir a correr, ya que las condiciones no eran tan buenas como el primer día y me quería quedar con esas sensaciones)
Nos llamó la atención la enorme cantidad de gente que había por la zona. Algo lógico, vistas las previsiones meteorológicas.
Algunos, mejor que se hubieran quedado en su casa, porque el domingo, en la carretera de Caños a Barbate, una furgo “gran volumen”, invadió nuestro carril y me rompió el retrovisor izquierdo… ni se molestó en parar, y eso que el suyo también quedó destrozado (a juzgar por los restos) Dimos la vuelta, pero se ve que prefirió darse a la fuga. Menos mal que tenemos seguro a todo riesgo.
Incidentes a parte, gran escapada de olas y aquí están los vídeos de recuerdo.